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Este proyecto busca aliviar los padecimientos de las mujeres víctimas de trafico humano ofreciendo servicios de atención psicológica a través de un centro comunitario situado en el barrio de Kamathipura, en Bombay. Desde el mismo se realizarán actividades para crear concienciación entre las propias mujeres víctimas de tráfico humano acerca de la naturaleza de los trastornos mentales, de forma que puedan identificar algunas de las dolencias que sufren y que a menudo no logran entender. Estas mujeres recibirán terapia psicológica en dicho centro, y los casos de especial complejidad se derivaran a clínicas u hospitales para recibir tratamientos más específicos. Asimismo, se ofrecerán actividades de Terapia Artística en las que podrán compartir un espacio con otras mujeres en su misma situación.
Una campaña de
26
Beneficiarios directos
Aquellas personas que de forma natural han sido beneficiadas por las acciones desarrolladas en la campaña.
115
Beneficiarios indirectos
Aquellas personas identificables que reciben un efecto potencial de las acciones desarrolladas en la campaña.
El presente proyecto se centra en la atención a las mujeres víctimas de tráfico humano con fines de explotación sexual, las cuales afrontan situaciones terribles que en muchos casos les llevan a padecer problemas y trastornos psicológicos diversos.
Por este motivo, se les ofrecerá apoyo terapéutico y emocional y se les derivará cuando sea necesario a clínicas especializadas en terapia psicológica. Se trabajará para identificar sus problemas psicológicos, ofrecerles servicios de terapia y referir aquellos casos de especial complejidad a otros profesionales o instituciones para intervenciones más especializadas.
Asimismo, se ofrecerá a las beneficiarias la posibilidad de participar en sesiones de terapia artística por medio de las cuales, mediante la elaboración artesanal de velas, podrán interactuar con otras mujeres, expresar sus sentimientos y emociones y de esta manera aliviar parcialmente sus padecimientos psicológicos.
Las mujeres víctimas de tráfico humano, así como sus hijas e hijos, enfrentan situaciones enormemente duras. No cabe duda de que cualquier persona que se ve arrastrada fuera de su hogar y trasladada a un lugar lejano y desconocido para ser prostituida a la fuerza, va a sufrir consecuencias terribles a nivel psicológico.
Es habitual que sufran multitud de trastornos mentales de diverso tipo, tales como depresión o ansiedad, adicciones, estrés, etc., así como complicaciones tales como problemas del sueño, desórdenes alimenticios, alteraciones del estado de ánimo. Son dolencias que les impiden llevar una vida normal y que deben ser atendidas de cara a que puedan recuperar una cierta normalidad en su vida.
Mejorar la salud mental de las víctimas de tráfico humano con fines de explotación sexual y de sus hijos e hijas.
26 mujeres víctimas de tráfico humano que sufren trastornos mentales.